En un lugar más allá del tiempo y el espacio...
Video-conferencias.
El futuro, ahora

Pues éso, que parece ser que el teléfono convencional va a dar paso a la video-conferencia dentro de no mucho tiempo, pero... ¿y entonces? ¿qué pasará si cada vez que descuelgas el teléfono alguien ve lo que estás haciendo? Aquí tienes unos cuantos consejos prácticos para defenderte, válidos tanto para ellos como para ellas.

1.- Acostumbrarte a perder la intimidad. Hazte a la idea que todo el mundo tendrá una ventana abierta a tu casa, así que dedícate a pasearte por el piso totalmente desnudo/a y con las ventanas abiertas de par en par. Si es invierno, cierra las ventanas, idiota.

Esta terapia de choque te será muy útil de aquí al futuro, con la proliferación de las cámaras de video-vigilancia, las webcams y los video-aficionados que rondan las playas buscando una buena toma para "Ver para Creer".

2.- Una vez vencidos esos estúpidos escrúpulos hacia la desnudez, ya estás casi preparado para enfrentarte a la cámara. Colócate delante de un espejo, y empieza a ensayar poses. Es fundamental un aspecto despreocupado. ¡Y deja de sacarte los mocos, joder!

¿Complicaciones con la tecnología?
Forma correcta de descolgar el teléfono en una orgia

3.- Si te pillan haciendo una fiestecita "privada", recógelo todo antes de contestar. Evitarás situaciones incómodas del tipo "¿De quién son esas bragas colgadas de la lámpara, cariño?" Sobre todo, niega la evidencia, y pon excusas como "interferencias con el porno del Plus".

4.- Dirige la cámara hacia un lugar neutro, como la cocina, el recibidor, las plantas del balcón... Y si tienes teléfono en el water, lávate las manos antes de contestar, guarro.

5.- Si después de todo ésto sigue sin llamarte nadie, átate una soga al cuello, pásala por la lámpara, llama a Videos de Primera, y cuando te contesten pega un salto. Con un poco de suerte no estarán comunicando, te harás famoso, y ya tendrás quién te llame. Pero... ¿quién te va a llamar a ti desgraciado?

Karmarada Zebra